Es una mantita de apego o también llamada doudou. Decidí hacerla en dos telas diferentes, una es suave y muy dulce al tacto, para que tanto el bebé como el niño al cogerla se sientan arropados como cuando están en los brazos de sus madres. La otra es agradable y bonita a la vista. El conejito lleva ojos de seguridad y la nariz va pegada y cosida, para que no tengan en ningún momento problemas de que se puedan atragantar.
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