Aquí está mi nuevo guarda pijama. En esta ocasión es una osita y no es porque la haya hecho yo, pero es preciosa y dan unas ganas de achucharla y besarla que no veáis.
Se puede poner extendida en la cama, como en la foto superior o colgada de la pared de la habitación, como se ve en la primera foto.
La osita está realizada en tela polar en color crudo. La nariz que la he puesto es de seguridad y los ojos están muy bien cosidos para que el bebé o niñ@ no tengan ningún problema a la hora de manipularla. Como es muy coqueta, lleva una flor en su oreja izquierda, de tela de punto con un botón forrado en el centro.
La tela con la que está hecho el saquito, es de piqué con un estampado de flores. En el cuello lleva una puntilla de encaje en color rosa, y tanto delante como detrás un lazo de cinta de raso en un tono rosa más claro, con un corazón como adorno en el centro.
Para poder meter el pijama hay tres botones, los cuales están cosidos a unos corchetes para facilitar al niño el que él solo pueda meter su pijama sin ayuda de un adulto.
Si se quiere también se puede usar para poner la ropa interior o cualquier otra cosa, la imaginación es libre, aunque yo la haya ideado para un solo uso, se puede utilizar de muchas maneras.
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